Punto de Vista

OPINION

 

 

* Cerrada, la competencia municipal

 

Filiberto Vargas Rodríguez

 

Prefacio.

No lo quieren admitir, pero el tema de la creciente inseguridad en la entidad será un factor, en muchos casos determinante, en las elecciones municipales de este año. *** Está claro que en municipios como Poza Rica, Tuxpan, Coatzacoalcos, Minatitlán, Córdoba, Fortín e Ixtaczoquitlán los pobladores tratarán de impulsar a aspirantes que estén dispuestos a hacer lo necesario para regresarles la paz que han perdido en los años recientes. *** Es cierto que la alta incidencia delictiva (esa que se niegan a reconocer los actuales servidores públicos) es consecuencia de las graves omisiones en las que incurrió la administración de Cuitláhuac García, y que, aunque hoy las cosas se estén haciendo de mejor forma, no se conseguirá un mejor ambiente en unas cuantas semanas. *** Es momento de que la gobernadora Rocío Nahle haga valer los acuerdos a los que llegó, en esa materia, con la presidente Claudia Sheinbaum. Por el proceso electoral que vivirá este año, Veracruz debe ser una prioridad para el gobierno federal y su partido. Si no consiguen reducir la incidencia delictiva, ese será un elemento que impactará en la voluntad de los ciudadanos. *** No basta con hablar de que “se está trabajando con inteligencia”. Debe haber golpes precisos y significativos contra las bandas de la delincuencia, pero deben actuar, también, contra las áreas podridas dentro de las corporaciones de seguridad. *** La inseguridad es una grieta por la que se le pueden escapar muchos votos a los representantes de la llamada “cuarta transformación”.

 

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Aunque el pasado domingo inició el período de inscripción de candidatos a las presidencias municipales, ningún partido político -ni la alianza oficial- ha llevado un solo nombre. Como suele suceder en estos casos, todas las organizaciones esperarán hasta el último momento (la fecha límite es el 2 de abril) para registrar sus planillas.

Con eso consiguen evitar que algún aspirante inconforme se “brinque” a otro partido y aprovechan todo el tiempo posible para ofrecer alternativas a los que no fueron elegidos.

Poco a poco, sin embargo, se van perfilando las contiendas que se verán en los principales municipios de la entidad.

Xalapa, la capital del estado, vivirá una cerrada contienda. La alianza Morena-Verde parece tener en la estructura, su mayor fuerza, y aunque Daniela Griego ha construido un buen prestigio como servidora pública, muestra poca conexión con la gente. Ella habrá de medir fuerzas con Silvio Lagos Galindo, que llevará las siglas del PRI, que es muy conocido por su propio trabajo político y en el servicio público, pero -además- por el buen nombre que aporta su padre, un reconocido notario.

Movimiento Ciudadano (MC) lleva una carta fuerte. Román Moreno fue candidato suplente a la diputación federal por Xalapa en el 2024, y acompañó en todo momento al propietario de esa fórmula, Américo Zúñiga. Hicieron una campaña impresionante y sucumbieron, por muy pocos votos, frente a la ola de Morena.

El Partido Acción Nacional (PAN) ha sido más severo en la selección de sus candidatos. Para Xalapa habían sugerido la posibilidad de invitar al propio Américo Zúñiga, pero al negarse éste a participar en la contienda municipal, la organización albiazul hizo una medición entre quienes habían expresado su interés por competir. Al final la designada fue Maribel Ramírez Topete, quien apenas el año pasado dejó las filas del MC. Reconocen que no tiene una sólida estructura electoral, pero le apuestan a cobijarla con figuras relevantes del panismo en la planilla.

El puerto de Veracruz sigue siendo un fuerte bastión del PAN. Hoy es gobernado por Patricia Lobeira (esposa de Miguel Ángel Yunes Márquez) y en la medición interna la ganadora fue Índira Rosales San Román, actualmente diputada local, antes senadora y también identificada con el equipo político de los Yunes.

El PRI envía a la exalcaldesa Carolina Gudiño, alejada de las actividades políticas pero con un buen nivel de conocimiento.

Todo parece indicar que MC irá con Óscar Lara, guerrero de mil batallas electorales en el puerto, conocido y conocedor de la política local. Tiene oficio y una base sólida.

Aunque Morena y Verde no lo han hecho público, todo parece indicar que al final la candidatura para el puerto de Veracruz se le quedará a la periodista Rosa María Hernández, actualmente diputada federal. Antes tendrán que buscarle acomodo a dos figuras relevantes que también levantaron la mano: Anilú Íngram y José Ricardo Ruiz Carmona.

En Boca del Río, otra posición fuerte del PAN, ese partido optó por la medición y, aunque por una escasa diferencia, la vencedora fue Maryjose Gamboa, figura que se mantiene invicta en los procesos electorales en los que ha participado. Si consiguen que Humberto Alonso Morelli sume su estructura, será difícil que venzan al PAN en ese municipio.

Morena y el Partido Verde llevarán como su candidata a la empresaria Bertha Ahued, novata en los quehaceres políticos, pero bien querida por un sector de la población.

Por MC competirá un viejo priista, con experiencia y alto nivel de conocimiento: Raúl Zarrabal Ferat. El PRI le apostará a la sangre joven y llevarán como su abanderado a Ernesto Vivas Enríquez.

Otros municipios perfilan ya el contenido de su boleta electoral. En los próximos días los iremos analizando.

 

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Epílogo.

Bien dicen que es muy mala costumbre gastar el dinero que todavía no llega a nuestras manos. La gobernadora está feliz porque una jueza sentenció al empresario Arturo Castagné a pagar 14 millones de pesos como “reparación” del daño moral que le habría causado por tacharla de corrupta. *** Ya el propio empresario salió a aclarar que no atendió ese juicio porque nunca recibió un

citatorio, lo que significa que, una vez informado de la sentencia, la impugnará en otras instancias y promoverá que sea anulada. *** No es, pues, momento de que la gobernadora “reparta” el producto de esa multa. No ha llegado a su bolsa y, por lo tanto, lo que tiene son billetes del “banco de la ilusión”. *** Allá por octubre del 2016, Andrés Manuel López Obrador presentó una demanda civil de reparación por daño moral, ante lo que consideró una difamación del diario estadunidense The Wall Street Journal, que publicó que omitió señalar varias propiedades en su declaración 3 de 3. *** “Les vamos a ganar, y la indemnización la donaremos a los niños migrantes deportados”, dijo en aquella ocasión. Por supuesto que no pasó nada. *** Ya en el gobierno, López Obrador sugirió que demandaría a los abogados de Genaro García Luna, por vincularlo con el crimen organizado, pero al final decidió no hacerlo. *** ¿En qué terminará la demanda de Rocío Nahle contra Castagné? En el olvido.

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