Arturo Reyes Isidoro

El sábado temprano, cuando vi las fotos que me hicieron llegar apenas las habían tomado, recordé aquella frase famosa del químico francés Antoine Lavoisier: la materia ni se crea ni se destruye, solo se transforma, que escuché por primera vez en la clase de química cuando estudiaba en la secundaria.

Una gráfica muestra a Marcos Theurel Cotero, secretario de Comunicaciones en el gobierno de Fidel Herrera Beltrán, solo, como si estuviera dormitando o descansando, en la primera fila de un sillerío que acaban de colocar en una calle de Azueta, para un acto de Rocío Nahle. El sillerío y el fidelista están encerrados en un enrejado, que siempre colocan para mantener a la gente distante de la zacatecana.

La otra imagen muestra a Ignacio Altamirano Cantell, quien fue jefe de la Unidad Administrativa de la oficina del gobernador Fidel Herrera Beltrán, con el clásico chaleco guinda de la 4T, afuera del enrejado, hablando con otra persona, se supone que supervisando que todo esté bien.

Por ahora no hubo foto de Diego Castañeda, secretario particular de Ricardo Landa cuando era subsecretario de Gobierno en la administración de Fidel Herrera Beltrán, quien ahora es uno de los coordinadores de la precampaña de la exsecretaria de Energía.

En este espacio comenté con toda oportunidad cuando todo el equipo de ayudantía del gobernador Fidel Herrera Beltrán se incorporó para auxiliar y cuidar la seguridad de la precandidata de Morena a la gubernatura. Pero los mencionados no son los únicos.

Me acordé de la frase del padre de la química moderna porque todos estos fidelistas, en su momento, están reconvertidos ahora y operando más que para Morena, para Rocío Nahle, o sea, solo se han transformado de tricolores a guinda.

Me queda claro que son ellos y no los morenistas los que están llevando y operando la precampaña de Rocío, lo que me hace concluir que todavía no concluye la etapa legal de las precampañas y la batalla es ya entre fidelistas y priistas (todo el resto que apoya a Pepe Yunes), entre hermanos de sangre, pues, con la diferencia de que la corriente del Tío Fide quiere meter a la familia a una extraña que no tiene el mismo ADN que todos ellos, porque huele a leña de otro hogar.

Yayo Gutiérrez, quien fue dirigente estatal del PRI, decía que en política los aplausos siempre son contra alguien.

Si se aplaude, pues, a los fidelistas, entonces los aplausos son contra los cuitlahuistas, a quienes se los acabó de cargar el payaso luego del histórico abucheo de obreros y trabajadores contra el gobernador Cuitláhuac García Jiménez el domingo 7 de enero en Río Blanco, que debieron haber dejado ardiendo las orejas al presidente Andrés Manuel López Obrador, tanto que esta vez ya no salió a defenderlo ni a justificarlo ni a cantarle loas como lo había venido haciendo.

Y viendo lo que ha estado pasando y por las versiones que tiene el columnista, Andrés Manuel por fin se acabó de convencer que Cuitláhuac y los suyos son un lastre muy pesado para la zacatecana, por lo que le recomendó, si no es que le ordenó, que los alejara a todos, sin excepción, y que los mantuviera lo más lejos posible de ella.

El caso más visible es el del exsecretario de Educación, Zenyazen Escobar García, quien además cometió el grave error político de tratar de competirle inscribiéndose para buscar la candidatura al gobierno estatal, para lo cual sostuvo una abierta lucha con el también exsecretario de Gobierno, Eric Cisneros, quien cometió el mismo error.

El columnista tiene la versión de fuentes internas del gobierno, bien enteradas, que tras su fallido intento y como al final terminó declinando por la zacatecana cuando vio que estaba perdido, ella le pidió que se le sumara, que la ayudara con los maestros y le cantó al oído que en agradecimiento lo iba a nombrar de nuevo en la SEV. Lo anduvo trayendo en actos arriba del presidium con ella, hasta que lo cortó.

Entonces le dijo que la ayudaba más yéndose a trabajar a su distrito, el de Córdoba (aunque él es de Ciudad Mendoza), y de paso que empezara a trabajar al electorado para hacerlo candidato a diputado (él soñó entonces en que será el próximo presidente de la Jucopo), aunque ahora le dice que primero le demuestre que de verdad tiene fuerza entre los votantes.

En Córdoba, donde he estado este domingo, a los reporteros locales no les ha pasado desapercibido que en los últimos actos que encabezó Nahle en la región ya lo mantuvo a distancia, tras las vallas y en otras ocasiones su equipo de seguridad no permitió que se le acercara (mis compañeros me mostraron imágenes de video), y menos lo subió al estrado ni lo colocó en el presídium como lo hizo antes. Ya no les queda duda que lo enfrió.

Pero igual me comentan que pasó con Eleazar Guerrero, de Unidos Todos, e incluso los que le operaban están desubicados porque ya no les piden que acarreen gente. Solo Zenyazen sigue acarreando maestros y trabajadores de la SEV a sus actos, pero Nahle sabe que son los mismos y que no van a aportar nuevos y más votos.

Aparte, Rocío nombró como coordinador de su precampaña a una gente totalmente ajena a Cuitláhuac y su grupo, el alcalde con licencia de Martínez de la Torre, Rodrigo Calderón Salas, quien con mucho candor confesó que no conoce a todos los grupos de Morena ni ha recorrido el estado, con inexperiencia, pero quien se dice totalmente leal a la señora, lo que nos dice que prefiere a un bisoño en el que confía y no a presuntos expertos pero que solo saben hacer acarreos, en los que además desconfía.

Viendo el rumbo que tomaron las cosas, cabe también el dicho de que nadie sabe para quién trabaja. Gente de Fidel llegó y los desplazó, pero no solo a ellos sino a los morenistas, a los que defienden su pureza y que se dicen fundadores, quienes quedan en condiciones de parias políticas.

Aparte todo lo anterior, no puede dejar de reconocerse la experiencia y la habilidad política de Fidel, quien aun en su lecho de enfermo sigue moviendo sus fuerzas, colocando sus fichas y aprovechándose del total desconocimiento que tiene la zacatecana del estado para tomar ya el control de la precampaña de Nahle y se apresta para tomar el control del gobierno sí hace ganar a Rocío.

Del Río Virgen se descarta totalmente; va Sergio Gil

En un desayuno ayer con reporteros de Córdoba, José Manuel del Río Virgen se descartó totalmente para buscar la candidatura de Movimiento Ciudadano a la gubernatura. Por separado, en entrevista con uno de ellos dio por hecho que el candidato será el dirigente estatal de MC, Sergio Gil Rullán.

Incluso bromeó cuando le preguntaron por qué él no iba a ser el candidato. Respondió que porque él es más “xingón” (en corto, al columnista, al que invitó a que lo acompañara al desayuno, cuando se enteró que estaba en la ciudad, le completó que “xingón, pero para golpear duro a la oposición”).

Del Río no suelta el tema de la defensa de los inocentes encarcelados en prisiones veracruzanas, lucha que dijo que decidió encabezar luego de que el gobierno de Cuitláhuac García Jiménez lo encarceló durante seis meses, en el fondo para frenar el avance en el estado de Dante Delgado y Movimiento Ciudadano.

Al columnista le dijo que definitivamente será hombre y no mujer el candidato de su partido.

Aprovechó el encuentro con los periodistas para promover la precandidatura de Jorge Álvarez Máynez a la presidencia de la república por MC.

Un detalle que llamó la atención fue que se hizo acompañar en el presídium por su esposa Mayra Amador, así como por su pequeña hija María, quienes también hicieron uso de la palabra.