La Suprema Corte del Pueblo.

OPINION

Por Inocencio Yáñez Vicencio.

Cuándo tuvimos la primera edición de la Suprema Corte del Pueblo?
Nos dice Benjamín Carter Hett, qué: » Para 1934,;Goebbels podía expresar su satisfacción de que la prensa respondiera a los eventos ‘ correctamente’ incluso sin que se le dijera qué hacer . Sin embargo , por lo general, escribió en su diario que ‘ cualquier hombre que todavía tenga un residuo de honor tendrá mucho cuidado de no convertirse en periodista».
» Del mismo modo , los jueces, los abogados, y la ley estaban entre las cosas que Hitler más despreciaba, y su régimen fue un largo asalto a la nacionalidad, previsibilidad e integridad de la ley. El caso más destacado en el primer año del régimen de Hitler fue el juicio contra los incendios del Reichstag, en el que no sólo Marinus van der Lubbe sino también tres activistas comunistas búlgaros y alemanes enfrentaron cargos de alta traición. Los jueces de la Suprema Corte del Reich mostraron un mínimo de valentía al absolver a los cuatro comunistas, contra quienes no existía evidencia o la policía la fabricaba de manera notoria y ridícula. Hitler se enfureció tanto con estás absoluciones que ordenó la creación de una nueva corte, la Suprema Corte del Pueblo ( Volksgerichtshof ), especialmente para delitos políticos. A lo largo del Tercer Reich, los jueces fueron objeto de críticas directas y, a veces, destitución, por emitir veredictos que desagradaban al Fuhrer. El régimen de Hitler puso de cabeza toda la idea de la ley como un esquema claro y predecible de derechos y deberes. Los juristas nazis, entre ellos el famoso Carl Schmitt, que una vez había sido abogado de los gobiernos de Papen y Schleicher, se hacía nudos para explicar cómo la ley era lo que el Fuhrer decía que era. Hablaron de un nuevo concepto legal, Fuhrer Power, en lugar de las ideas más antiguas de legitimidad constitucional» Este texto está tomado del libro: La Muerte de la Democracia. Página 291, bajo el sello de la prestigiada editorial Crítica. 2021.
Cuando Pepe Yunes y quien escribe, hablamos de lo valioso del texto de Benjamin Carter, lo pondremos mucho, pero, por lo que a mí respecta, no pensé que retratara tan bien el escenario a qué nos ha llevado Morena.
Es un libro que sin abstracciones, describe puntualmente la aparición de Hitler y las fuentes que nutrieron ese proyecto macabro. La enseñanza más importante de esa extraordinaria obra es que nos permite conocer desde el 28 de agosto de 1914, lo que se denomina la puñalada por la espalda, la Constitución de Weimar, » El cambio de Hitler del socialismo revolucionario a la extrema derecha antisemita es importante para comprenderlo no sólo a él, sino lo que estaba sucediendo en Alemania en 1919″ Página 85, de la obra citada.
Leer este libro nos permite darnos cuenta que esta abominable experiencia no se presentó súbitamente sino como parte de un proceso , con el aval de las élites políticas y de las masas.
Bien podemos equipar el momento de la votación fabricada por Morena para cambiar los jueces profesionales por jueces de tómbola con la Ley de Habilitación de Hitler, porque tanto los morenistas como a los nazis, concentró todos los poderes legales.
Con la supresión de la Supremacía Constitucional, es decir, con la eliminación de la facultad de vigilar que por parte del Máximo Tribunal, que la voluntad de los poderes constituidos no se coloque por encima del poder constituyente, se delega la soberanía, cuando lo que puede delegarse es su ejercicio, la ejecución de la voluntad soberana, pero no la soberanía, haciendo, a partir de la eliminación de la supremacía constitucional, que la ley y no la Constitución sea la validación de nuestro sistema jurídico, todavía más, al concentrar todos los poderes en el Ejecutivo, abrazan la tésis de Carl Schmitt, de que el guardián de la Constitución sea el Caudillo y no un Tribunal Constitucional.
Fincar el poder, no en la ley sino en la fuerza, ha llevada a Claudia Sheinbaum, a pisotear todas las reglas del derecho, lo que hasta ahora realiza sin resistencia, pero en su relación con el país de vecino del Norte, como su fuerza es menor, eso le ha hecho ver ridícula y sin una pizca de dignidad, dándole vida aquél decir que reza que el mediocre es soberbio con el de abajo y rastrero con el de arriba. Llamó a la movilización con motivo de la represión que están sufriendo los inmigrantes mexicanos en territorio norteamericano sin pensar que era una trampa que Trump tendió para provocar la respuesta que necesita para su exterminio, y con la arenga de nuestra presidente y las banderas mexicanas ya tiene el recaudo que necesitaba para exaxcerbar el Nacionalismo y contar con el respaldo de sus connacionales.
Los Ángeles nos recuerdan marzo de 1933, cuando Hitler, mandó a quemar el parlamento ( Reichstag ), para desatar la carnicería contra los comunistas. Trump es un gorila, que anda libre cuando debía estar en la cárcel por intentar un golpe de Estado y obstruir la justicia. Newson, gobernardor de California, lo ha dicho bien, está cruzando la línea y acabando con la República y la democracia. Pero Trump no salió de la nada. El capital imperialista está siendo derrotado en sus propias reglas por China y ha determinado cancelar la esencia del capitalismo, con proteccionismo y aislacionismo, por eso se han entregado a un líderazgo vandálico, confiando en que saldrán victoriosos de una guerra que , ya lo dijo: la tenemos ganada, porque somos los más fuertes.
Bien lo decía Vicente Lombardo Toledano: el nazifascismo es la última arma de que hacen uso los grandes capitales cuando ven amenazados sus intereses.
Cómo externa Benjamín Carter, los que tomaban las decisiones en Alemania, echaron mano de Hitler, porque creyeron que lo podían manejar y que por bestia no sabría qué hacer con el poder. Parece que en Estados Unidos no aprendieron la lección germana. Por lo pronto ignoran las palabras de cierre de La Muerte de la Democracia: Nosotros hoy contamos con una ventaja sobre ellos : tenemos su ejemplo ante ellos.
No sólo los estadounidenses parecen olvidarlo. Como dice Anne Applebaum en su libro: El ocaso de la democracia: ahí está Polonia, Hungría, Italia ( No me llenó este libro. Muy arrogante).
Claudia, manda a volar a la OEA, la ONU, a la oposición mexicana, a todos, porque no tiene argumentos, sólo sabe hacer valer la fuerza, pero ante una fuerza mayor, soporta humillaciones y nos hace pasar vergüenzas, por ahora, más tarde su denigrante papel, será de Estado Vasallo.

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