DE PRIMERA MANO

OPINION

 

Román, por la campanada

*Se registró formalmente por Xalapa
*Ya es precandidato naranja

Por Omar Zúñiga

La competencia por Xalapa, la joya de la corona en la elección municipal de junio próximo se pone más ríspida día a día.
Morena da por hecho que será quien repita en la presidencia municipal (en todas de hecho), y así Esteban Ramírez Zepeta ha borrado de un plumazo a los demás partidos y mucho más importante, a las personas.
Será esta una elección en donde los individuos, los candidatos, serán determinantes, sobre todo en una ciudad como Xalapa, que tradicionalmente ejerce un voto razonado y no se “casa” con ningún partido.
No hay que olvidar que la autoridad municipal, poniéndolo en términos policiacos, es el primer respondiente ante la ciudadanía, a la que no le importa si su asunto es de competencia municipal, estatal o federal, invariablemente la percepción del gobernado es que su bronca es municipal, y háganle como quieran.
En este contexto es que surge la candidatura de Román Moreno por Movimiento Ciudadano, que guste o no, es de los partidos con mayor crecimiento, no sólo en Veracruz, sino en todo el país.
Pero el nombre de este empresario es más importante, se trata de una persona que ha trabajado tradicionalmente en y por Xalapa, y a eso le apuesta.
Este martes 28 de enero precisamente, concretó su registro como precandidato naranja a la presidencia municipal, quizá sea precandidato único, aunque esta situación en caso de concretarse, no lo manda a tirarse a la hamaca, por el contrario, promete que partir del próximo lunes 3 de febrero, fecha en que inicia la precampaña, recorrerá Xalapa…, por enésma ocasión.
Consciente de que en la capital hay mucho más necesidades de las que se conocen públicamente, incluso con cinturones de miseria que no aparecen en los textos oficiales del gobierno estatal, y si se trata de medios afines, pues mucho menos; pero Román llega con ganas de trabajar y con esa visión empresarial de poder invertir y atraer inversiones, con respuestas concretas, sin demagogias, sin la creación de lugares idílicos luego de cuatro años, pero sí con bases sólidas para cambiarle la cara.
Como quedó demostrado en su evento posregistro, con la suma de voluntades, de grupos, de empresarios…, de ciudadanos, de propios y extraños que ven con buenos ojos su irrupción en un escenario que no presenta más que cartuchos quemados, los mismos y los de siempre, dice la vox populi.
Ese es Román Moreno, sin cola que le pisen, sin negativos, una cara nueva, fresca en la política, pero con la experiencia que da la iniciativa privada para poder administrar una ciudad como Xalapa, sin echarle las culpas a nadie, siempre para adelante, como lo ha hecho en su vida personal.
Si le llegan a escarbar, seguro se sacudirá de encima lo que le haga daño.
Veremos pues, cómo se desarrollan las cosas, pues ante la división interna en que se encuentra Morena, el partido que piensa que con un burro como candidato puede ganar la elección, con un dirigente estatal ensoberbecido repartiendo (¿vendiendo?) candidaturas, con más de 20 aspirantes a una posición, gente como Román está listo para dar la campanada.

¡Qué barbaridad!
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