COMO VEO… DOY
POR NEFTALI URBINA DÍAZ.
*15 MILLONES DE PESOS DE LOS XALAPEÑOS A LA BASURA
*GOBIERNOS MUNICIPALES INFILTRADOS POR EL CRIMEN ORGANIZADO
*¿SERÁ QUE CAIGA PEÑA NIETO?
Con un costo de 15 millones de pesos, la “ciclovía” de Hipólito Rodríguez Herrero es un verdadero fracaso para la ciudadanía xalapeña. Al recorrer por la avenida Ruiz Cortines, los desperfectos en ésta “obra sin precedente”, son increíbles: Falta de tapas de alcantarillas, huecos que ponen en peligro la circulación de los ciclistas, ya no se ve la señalización ni el espacio de sólo para ciclistas lo que hace que, los conductores, invadan el carril con sus vehículos.
Expertos en construcción señalan que la empresa que se encargó del trabajo, infló su costo poco más de 3 veces, obviamente, en complicidad con Hipólito Rodríguez Herrero, para poder llevarse “unos centavitos” a la bolsa. Hoy vemos que no es una obra prioritaria, habrá gente que utilice la bicicleta y diga que es necesaria y, sin embargo, nunca fue una prioridad para la capital del Estado de Veracruz.
Una verdadera pena que, 15 millones de pesos de los xalapeños, hayan ido a parar a la basura y a los bolsillos del constructor de la ciclovía y del ex alcalde Hipólito Rodríguez Herrero mientras que, obras prioritarias como un biodigestor, que ya se encontraba listo y presupuestado, nunca se realizó; un centro regional de procesamiento de deshechos, tampoco se hizo, y ya no hablemos de drenaje, pavimentación, alcantarillado, guarniciones y banquetas que, en lo municipal, son obras que se hacen porque, simplemente se tienen que hacer.
Por fortuna, la urgente obra pública que se está realizando en esta capital del Estado va a cambiar para bien de los xalapeños, por fin veremos una ciudad transformada, con un boulevard a lo largo de la avenida Lázaro Cárdenas que sin duda será un orgullo para los Xalapeños, vemos obras muy importantes en varias calles y avenidas, tanto en el centro, como en colonias y congregaciones de nuestra hermosa capital veracruzana.
Por otro lado, es terrible ver cómo están las cosas en materia de seguridad en el país, hemos padecido sexenios cruentos y, sin embargo, el presente, rebasa todo lo imaginable. Estados y municipios infiltrados por el crimen organizado, ya sea porque pagaron la campaña del candidato o porque los candidatos son integrantes del crimen organizado. Por eso mataron a los hijos del presidente municipal de Celaya, porque el munícipe, no permitió que se infiltrara el crimen organizado en su comuna, por eso tienen amenazada a una alcaldesa.
Y en Veracruz ¡También se cuecen habas! Municipios como Sayula de Alemán, Misantla, Colipa, Juchique de Ferrer, Rafael Delgado, Tuxpan, Pánuco, Poza Rica, Coatzacoalcos, por mencionar algunos, son lugares en donde se ha desatado la violencia en extremo. El factor común es que, todos esos municipios, tienen alcaldes, síndicos o regidores protegidos por el secretario de gobierno, Erick Patrocinio Cisneros Burgos y, hasta donde se sabe, fue precisamente con la llegada del secretario de gobierno que, Coatzacoalcos se convirtió en un infierno y hoy, parece un pueblo abandonado, a pesar de estar gobernado por Morena.
La quema de patrullas, levantones, cobro de piso, balaceras, trata de blancas y un largo etcétera, es lo que abunda en los municipios citados, baste decir que, en Misantla, dicen que el ex contralor del ayuntamiento resultó ser líder de una secta satánica que protege al presidente municipal, aseguran que es violador y por eso renunció al ayuntamiento y adivinar si el munícipe también es violador, o cuantos violadores habrá en el ayuntamiento, porque, señalan los misantecos, el alcalde, Javier Hernández Candanedo, se encargó de repartir dinero y chillarle al secretario de gobierno, para que su ex contralor, saliera por un delito menor al de violación y así fue. ¡Vaya, si entrega obras de relumbrón con costos inflados que, dan envidia! ¡Hasta dónde está la corrupción en esos municipios!
Por fortuna, una ley impide que, los directores de policía los ponga el alcalde si antes no están preparados y capacitados y, además, sin antecedentes penales, de lo contrario, sería horrible saber que, comandantes de la policía municipal de Veracruz, son miembros de cárteles o simplemente, pertenecen al crimen organizado.
Así las cosas, en nuestro país, bastó el ejemplo para que cundiera y el ejemplo lo pusieron, desde arriba, por eso hay que entender que, eso de que la ley es la ley, aplica para los enemigos de la 4T porque, para el cártel de Morena en el poder, no es más que un chiste.
En otro orden de ideas, lo que fue un problema “entre narcotraficantes”, según el entonces procurador Jesús Murillo Karam, porque, según un alto funcionario en Los Pinos, “todos son delincuentes”, porque sabían que, siendo de Ayotzinapa, el hecho tenía una carga política y había que hacer pasar a las víctimas, como victimarios, comienza a cobrar víctimas políticas. Hoy se sabe que, existe un grupo en Guerrero que está vinculado con José Luis Abarca y María de los Ángeles Pineda. Hoy, ese “problema entre narcotraficantes” comienza a levantar ámpula de nuevo con la caída de Murillo Karam, pero faltan más. Tampoco podemos perder de vista que, se aproxima un proceso electoral en el que, Morena tiene que ganar o ganar y sólo la detención de “una cabeza grande”, podría volver la cara de la gente hacia la esperanza que fue, en su momento, ese partido fundado por López Obrador, son sueños guajiros pero ¿Qué tal si sí se apunta un gol deteniendo a Peña Nieto? A quien, por cierto, acusan de que, un crimen municipal, se le volvió un crimen de Estado.