Irineo Pérez Melo.- Como se había anunciado oportunamente, cientos de mujeres participaron en la marcha para protestar, en el marco del Día Internacional de la Mujer, por la falta de equidad e igualdad, pero sobre todo por la inseguridad e injusticia que vive el sector femenil veracruzano.

Desde las once horas, de todas partes de la ciudad empezaron a arribar niñas, jóvenes y adultas en las inmediaciones del Teatro del Estado General Ignacio de la Llave y poco después del mediodía marchar hacia la Plaza Sebastián Lerdo de Tejada, en donde se congregarían para expresar su sentir por la falta de políticas públicas que les favorezcan una vida digna y segura en Veracruz.

Con mensajes relacionados con la represión ancestral que han padecido y de buscar derribar el sistema patriarcal, capitalista, racista y clasista que intenta borrarlas, las mujeres reiteraron su llamado al gobierno estatal para crear un ambiente que les garantice un clima de tranquilidad y seguridad para todas ellas.

En dicha marcha, concurrieron miembros de diferentes colectivos feministas, familiares de desaparecidos y de víctimas de feminicidios, instaron al gobierno de Cuitláhuac García Jiménez a cumplir con los protocolos y programas que rigen para el sector femenil de la entidad, y evitar criminalizar a las mujeres en acciones en las que se ven inmersas.

La marcha inicio en el Teatro del Estado General Ignacio de la Llave, para caminar después por la Avenida Manuel Ávila Camacho. Algunas de las manifestantes iniciaron acciones vandálicas, pintando y destrozando todo lo que encontraban a su paso, como fue las instalaciones del Instituto Federal Electoral.

La escultura del monumento a la Madre fue pintarrajeada y arrojaron pintura roja para simular sangre. Ahí se detuvieron un poco para pasar lista de las mujeres que han sido asesinadas en el estado de Veracruz y que a la fecha no se han dado con los responsables en la mayoría de los casos.

Al continuar con su trayectoria, las bardas del Seminario Menor también fue objeto del enojo de las feministas, en donde pintarrajearon mensajes en contra de la Iglesia Católica.

Al llegar a la calle Bentacourt, se dio un altercado con los elementos policiacos que desde ese sitio y hasta el palacio de gobierno habían formado una valla para impedir que los edificios de esa parte de la ciudad fueran objeto de pintas. Las responsables de resguardar al contingente llamaron a la cordura a todas las féminas y no caer en provocaciones para no ser objeto de actos represivos por parte de los elementos del orden.

Un grupo de féminas, acompañadas de niñas, a la altura de una negociación telefónica, se sumó a la marcha y trató de seguir hacia la avenida Enríquez, pero los policías que habían formado una valla, se los impidieron.

Ni la intervención de la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Veracruz, Namiko Matsumoto Benítez, logró abrir el paso, pues era la orden de no permitir marchar por ese sitio, pues la ruta permitida era seguir por el viaducto hacia Zaragoza para llegar a la Plaza Lerdo, por lo que tuvieron que seguir ese camino.

El grueso del continente, al arribar a este sitio, aprovecharon la oportunidad dada para realizar sus pintas. Una vez realizado su cometido, siguieron su camino y al llegar a la torre de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) vandalizaron las protecciones colocadas de antemano.

Esto no fue impedimento alguno porque con proyectiles que lanzaron rompieron los cristales de la planta baja e intentaron incendiar el edificio lanzando bombas molotov, provocando un connato de incendio que fue sofocado por el personal que se encontraba en el interior del mismo con los extintores que ya tenían preparados para tal fin.

Después de este incidente, las marchistas arribaron a la Plaza Lerdo, que los grupos activistas denominan Regina (periodista de un semanario nacional que fue asesinada el 28 de abril de 2012) y pretendieron quemar las lonas colocadas en el frente de palacio de gobierno con las fotografías de las primeras titulares del ORFIS, FGE y de los poderes Judicial y Legislativo, así como de la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Veracruz.

Seguidamente, quemaron cartulinas utilizadas en su marcha y en una especie de ritual que denominaron “Akelarre”, danzando alrededor del fuego producido al ritmo de un tambor y cantando himnos feministas, para posteriormente colocar algunas fotografías y velas, con mensajes contra la violencia de que son objeto las mujeres.

En esta ocasión los edificios de particulares no fueron vandalizados, solo los edificios públicos mencionados y en espera que el gobierno de Cuitláhuac García Jiménez, que se jacta de que en su administración hay muchas mujeres como funcionarias, atienda du reclamo: garantizarles seguridad y acabar con los feminicidios, porque es durante esta administración en donde se han registrado el mayo número de asesinatos de mujeres.