Lluvias registradas insuficientes para amortiguar los efectos de la sequía; esto causa baja producción de café
• Cosecha “regular” en el ciclo 2022-2023, apenas se produjeron 4 millones de quintales: Morales Espinoza.
Irineo Pérez Melo.- Pese a las lluvias registradas en los últimos días, no han sido suficientes para amortiguar los efectos de la sequía que se trae desde tres ciclo anteriores en varias regiones de la entidad, sobre todo en las zonas bajas y medias de la entidad, que hace más oneroso producir café.
Lo anterior fue informado por José Julio Morales Espinoza, presidente de la Rama Productiva Nacional Café-CNC, quien dijo que el temporal lo están resintiendo las plantas al disminuir su potencial productivo por la falta de agua y de fertilizantes que, en los últimos meses por su alto costo, quedó fuera del alcance de los cafeticultores, sobre todo de los pequeños productores.
Mencionó la importancia de que los gobiernos federal y estatal establezcan programas de apoyo para dotar de fertilizante a este sector productivo, ya que de lo contrario después de no llover en los últimos cuatro o cinco meses y al caer los primeros aguaceros, se espera una floración extraordinaria, pero si no se fertiliza la mata, no dará la producción deseada.
Dijo desconocer el monto de hectáreas sembradas de café que se encuentran en esta situación por la falta de un padrón actualizado, ya que el levantado para integrar a los productores al Programa de Bienestar para la Producción “es un listado con algunos datos, pero no tiene una referencia exacta como se requiere para hablar de un padrón y cuantificar las áreas y la producción, lo que ocasiona un total desconocimiento en torno a cuántos quedamos, cuántas hectáreas exactamente, solo se tiene un estimado, pero nada más”, agregó.
Por otro lado, se refirió a la cosecha del ciclo 2022-2023 “fue regular, no fue una gran cosecha ni ha habido, porque cada día cuesta más producirlo y sí han bajado los volúmenes de producción”, sin especificar el monto del porcentaje en que éstos se han reducido.
“Lo que sí es cierto es que en algún momento como país llegamos a producir 6 millones de sacos, allá en los inicios de este milenio y luego con la roya, caídos hasta 2 millones de sacos y ahora, se dice andamos produciendo 4 millones de sacos, pero no hay exactitud en ese tema, ni tampoco tenemos claras las estadísticas de las cosechas”, dijo por último.
