• No hay una reforma integral al campo y sigue sin atenderse la deuda histórica que se tiene con los campesinos: Lindo Chaga.

  Irineo Pérez Melo.- Los productores agropecuarios “estamos indignados porque no vemos que (el gobierno de) Andrés Manuel López Obrador le esté apostando al campo. No es su prioridad. A dos años de su gobierno no ha anunciado realmente una reforma integral al campo y es una deuda histórica que tiene con los campesinos”.

  Esto lo aseguró Rafael Lindo Chaga, presidente del Frente de Organizaciones Sociales y Económicas del Campo (FOSEC), quien criticó la propuesta de Presupuesto de Egresos para el ejercicio fiscal 2021 para el campo mexicano, al incrementar en 3.6%, lo cual resulta insuficiente para el desarrollo de este sector productivo y desaparecer varios programas relacionados con este rubro.

  En entrevista, el dirigente campesino señaló que esa “es nuestra gran indignación”, al estarle apostando a programas subsidiarios y electorales, que en darle plus a aquellos que van enfocados al desarrollo productivo del sector rural mexicano.

  “Para mí es un programa subsidiario, es un programa electoral; siempre lo he dicho y lo voy a seguir sosteniendo. Independientemente de que simpatices o no con el proyecto de Morena, con el gobierno, si hay que señalar de manera puntual todo lo que está pasando, o sea, no podemos salir a aplaudir algo que no está bien”, agregó.

  Lindo Chaga recalcó que vemos que el Presidente de la República no le está apostando al campo, “no es su prioridad, porque (en lo que va de su gobierno) no ha anunciado una reforma integral al campo y es una deuda histórica que se tiene con los campesinos; y más él, porque muchos votos vinieron del campo; mucha gente que vive en el campo voto por él y creo que esa será su gran deuda”, puntualizó.

  Ante este panorama, consideró que el cobro (de facturas) se dará en el 2021 o tal vez en el 2024; “ahí se dará cuenta de todos los errores que se han venido cometiendo y que, ya se escucha en la población, el enamoramiento hacia el proyecto de la esperanza se ha estado cayendo, se ha estado desvaneciendo”.

  Y es que dentro de la propuesta de Decreto de Presupuesto para el Ejercicio Fiscal 2021 del gobierno federal, que el Jefe de la Nación envió a la Cámara de Diputados se está planteando para la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) un techo de 49,291.6 millones de pesos y se contempla la desaparición del componente financiero, es decir, aquel que da cobertura al financiamiento crediticio para el campo que para el 2021, que se plantea en ceros.

  Además, programas como Crédito Ganadero a la Palabra, el Programa de Fomento Ganadero, el de Trazabilidad Individual Ganadera, Fomento a la Ganadería, Normalización de la Calidad de Productos Pecuarios y Repoblamiento de ganado infectado con Tuberculosis Bovina, desaparecen de la propuesta de financiamiento al campo.

  De igual manera, se cancela recursos a los programas de apicultura, así como los Fondos de Contingencia para el sector avícola y porcícola, los Proyectos Estratégicos con Valor Agregado, los de Desarrollo Rural y los programas de Vinculación Productiva.

También, desaparecen los programas de Apoyo a Estrategias para las cadenas Productivas, Sustentabilidad Pecuaria y los de Financiamiento y Aseguramiento del sector rural; y se mantienen sin recursos desde el 2020 los programas de concurrencia con las entidades federativas, por lo que no permitirá articular iniciativas de los gobiernos estatales en materia de producción agropecuaria.