habitates del Pixquiac, Zoncuantla y San Andrés Talalnehuayocan denunciaron diversas anomalias.
Ricardo Contreras a nombre de los vecinos de Briones, dio a conocer que debido a la construcciones de un hotel y un centro hípico en el Bosque Mesófilo de Montaña en los límites de Coatepec, Xalapa y San Andrés Tlalnelhuayocan continúan sin la intervención de autoridad alguna.
En conferencia de prensa realizada en conocido café del centro de Xalapa, los vecinos del Pixquiac Zoncuantla y Reserva de Briones, dieron a conocer que la demanda de amparo para detener la construcción sigue en trámite desde hace ocho meses en el Juzgado Décimo Quinto de Distrito con los expedientes 1210/2018 y 1159/2018 pero que los trabajos continúan poniendo en riesgo el equilibrio ecológico de esta zona.
«Se están realizando dos desarrollos turísticos, el primero conocido como el Centro Hípico Briones, frente al actual centro hípico, y el otro es el Hotel Rancho La Niebla en la zona de Tlalnelhuayocan, ambos dentro del bosque mesófilo de montaña y están controvertidos por las leyes ambientales como el Decreto del Área Natural Protegida del Archipiélago de Bosque y Selva de la Capital y el Programa de Reordenamiento Ambiental”, denunció.
Dio a conocer que estas construcciones pondrían en riesgo la fuente abastecedora de agua potable no solo para esta zona sino para la región, ya que dijo no cuentan con el líquido suficiente para atender la demanda de un hotel o la generada por la atención a caballos.
«Estos desarrollos son contrarios a derecho y hasta anticonstitucionales porque violan el derecho al medio ambiente sano y violan el derecho al agua; la afectación es para toda la comunidad porque la fuente de abastecimiento para esa zona es un solo manantial pensado para un fraccionamiento hace 30 años y no podemos abastecer a dos o tres centros hípicos y a un hotel que no sabemos cuántas habitaciones va a tener», señalaron.
Añadió que si bien actualmente en esta zonas hay viviendas, su impacto no es tan grande como el que implicaría la prestación de estos servicios turísticos.
«Las personas que ahí vivimos hemos construido viviendas de bajo impacto ambiental, y estamos convencidos que es una zona de baja densidad poblacional que permiten la existen de espacios verdes y que el medio ambiente y uso de suelo sea adecuado», finalizó.