En Altotonga se castiga a la gente del campo No las dejan vender sus cosechas
José Sarmiento
Altotonga, Ver.
Ningún apoyo para las familias del campo y las autoridades de Altotonga no les permiten vender sus productos alimenticios, a pesar de que se trata de una actividad esencial, porque venden frutas, verduras y legumbres que ellos mismos cultivan y significan el sosten para sus familias.
Doña Lucrecia a sus 65 años de edad tiene que caminar diariamente por una hora desde Tezahupan hasta la cabecera municipal de Altotonga, para poder vender los productos que cultiva.
Lamenta que el alcalde Ernesto Ruiz Flades no comprenda y mucho menos conozca el esfuerzo que diariamente realiza un campesino para cultivar la tierra, cuidar sus plantas y poder llegar a pie hasta la ciudad.
«Yo todos los días me levanto a las cinco de la mañana, pongo el nizcón para luego molerlo y obtener la masa para hacer tortillas, de ahí tengo que hacer el desayuno e inmediatamente cosechar de mi huerto familiar y caminar una hora para llegar a vender mis quelites, chile pimiento, tomate o maíz.
Lo malo es que las autoridades no te dan pero si te quitan, el alcalde sólo ayuda a los ricos, a nosotros nos ve con menosprecio cuando nosotros los campesinos con nuestro trabajo también aportamos para que Altotonga crezca.
