Cirio Ruiz González miembro del Consejo Regional del Café y de la Coordinadora Nacional de Organizaciones Cafetaleras, dio a conocer que actualmente los cafetaleros ya no exportan café al extranjero ahora buscan venderlo tostado y molido.

Comentó que ahora ya no hay organizaciones que exportan, aun cuando otros estados sí exportan café orgánico.

«Pero nosotros ya no exportamos, vendemos café tostado, que es una alternativa para seguir adelante, pero sabemos cuáles son los gastos, cómo hay que hacerle para exportar, pero el control es muy muy grande que tienen las compañías, y lo peor, el gobierno los apoya, ese es el asunto, promueven el café soluble, no es la alternativa al café soluble porque ese mercado lo controla la Nestlé», señaló.

Ante esto, subrayó que hace falta un gobierno aliado, a falta de una respuesta global y nacional, para apoyar a las organizaciones.

«Celebramos eso, de que estemos vivos como organización, y tener propuestas claras para seguir adelante».

Esto se debe a que este 14 de junio, se cumplen 43 años de la  «Unión de Productores de Café de Veracruz» misma que sirvió como base para la fundación del Consejo Regional del Café de Coatepec y de otros proyectos Regionales en Veracruz por lo que un grupo de cafetaleros se reunió en Plaza Lerdo para conmemorarlo.

«Hoy venimos a festejar que seguimos en resistencia, seguimos organizados, quizá con mucha más experiencia, yo diría, con muchas historias de por medio, porque en 43 años aprendimos a registrarnos legalmente, a gestionar créditos, a comercializar», comentó.

Recordó que en los años 80 llegaron a manejar hasta 55 mil quintales y ahora las cosas cambiaron, pues el gobierno cambió el artículo 27 constitucional, la tierra está en proceso de privatización y la exportación ya no es necesaria, porque las compañías están dentro del país.

Finalmente comento, «Y acá se les vende directamente, y prácticamente la situación cambió. Se está atacando mucho a las organizaciones, promoviendo mucho el individualismo, y el reto es volver a hablarnos de frente en los pueblos y analizar más a detalle la situación, porque es urgente, porque ahora son cuatro compañías, cinco las que compran todo el café, y adquieren más del 80 por ciento de la cosecha nacional».