La oposición en Veracruz

Enrique Yasser Pompeyo

A pesar del descalabro electoral que sufrieron el PRI y el PAN en las elecciones del año pasado, además de la pérdida de registro del PRD, ambos institutos políticos pretenden dar batalla el 1 de junio.

En el otrora poderoso partido tricolor, este fin de semana comenzará la pasarela de aspirantes a las candidaturas para las presidencias municipales.

Viernes, sábado y domingo se observará a quienes buscan ser los abanderados oficiales.

El hecho cobra relevancia y genera interés para conocer a quienes participarán en los comicios, particularmente en los municipios más grandes.

Ayuntamientos como los de Veracruz, Boca del Río, Xalapa, Poza Rica, Pánuco, Tuxpan, Córdoba, Orizaba, Coatzacoalcos, Minatitlán, entre otros, son los más disputados por los altos presupuestos que manejan.

Pero también hay interés por conocer a los personajes que buscarán retener los gobiernos locales donde todavía gobierna el Revolucionario Institucional.

Algunos de los municipios que están en la mira son los de Orizaba y Perote, sobre todo este último, pues es el terruño del ex candidato a la gubernatura José Francisco Yunes Zorrilla.

Y como se debe cumplir con lo que establecen las leyes electorales en materia de paridad de género, también será interesante conocer a las mujeres que darán batalla y en cuáles municipios.

El Partido Acción Nacional concluyó parte de su proceso interno y continuará con la aplicación de consultas en más de 80 municipios para conocer las preferencias de los ciudadanos con respecto a los aspirantes.

En la lista se incluye a municipios chicos, medianos y grandes, incluso, aparece Boca del Río, pero no Veracruz Puerto o Xalapa, donde todo parece indicar que ya estarían definidos quienes serán sus abanderados o abanderadas.

La Comisión Permanente del Consejo Estatal del PAN deberá emitir el dictamen sobre los candidatos a más tardar el 11 de marzo, mientras que la Comisión Nacional Permanente tiene hasta el 14 del mismo mes para ratificarlo.

Ya se verá si los candidatos de ambos partidos son competitivos, si se encuentran bien posicionados entre los ciudadanos o si serán las mismas caras de siempre, o si también incurrirán en nepotismo.

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