BARRA LIBRE.
Alfredo Quezada Hernández.
EL PRI – INSTITUTO POLÍTICO RESIDUAL.
En la esquina de Ruiz Cortines y Francisco Moreno las cosas se han salido de control. La escases, pero bárbara, de candidatos a las alcaldías los tiene de cabeza, los puso más locos de lo que ya estaban.
Obligados a una alianza, los priistas están urgidos de sobrevivir, en sistemas de partidos es lo peor que puede existir, su agonía es inevitable, sólo prolonga su desaparición.
La llegada del campechano a la dirigencia nacional le vino a hundir el último clavo al ataúd, desde su arribo, el Revolucionario Institucional ha dejado de ser oposición para pasar a figurar como una comparsa del ejecutivo federal.
Sobra decir que su caída empezó desde que Vicente Fox asumió la presidencia de la República, allí se puso fin a más de siete décadas de pompa y poderío partidista.
A veinte años de distancia dicho instituto político está en ruinas, únicamente escombro es lo que encuentran los escasos priistas qué se atreven a pisar la sede tricolor.
Las vacas sagradas del PRI, nunca pensaron, o cuando menos imaginaron, reinventarse, en renovar sus estrategias, pero sobre todo en exigir buenas cuentas a sus gobernadores, a sus representantes populares. En pocas palabras les valió madre todo, se siguieron sintiendo intocables y ahora las consecuencias.
Seis años, con Peña Nieto, les duró el gusto de volver a ostentar el poder y lo dejaron ir. La madriza qué les pegó el macuspano en el 2018, por cierto, fecha en que el PRI presentó su último candidato, no les dejo aliento alguno. Desde allí la agonía.
Para el electorado hablar del Revolucionario Institucional es hablar de políticos corruptos, de porquerías, de representantes populares oportunistas, de gandallas.
Quiere ejemplos, allí están los ex gobernadores priistas en prisión, esos que malversaron el tesoro público.
Lo anterior sin mencionar los caprichitos del campechano, sí, eso de reformar los estatutos partidistas con la única ambición de reelegirse y bajo el pretexto de reconstruir el partido.
Por favor
Ahora, aquí en Veracruz, con un dirigente que no ve mucho menos escucha a las bases, no se ve por donde logre, cuando menos, reunir la cuota de candidatos a las alcaldías, porque eso de lograr victorias suena más fácil que difícil
La desaparición del PRI está a la vuelta de la esquina.
Ya perdió gobernaturas, ya perdió espacios en ambas cámaras, ya perdió militancia, cuadros, solo le resta perder el registro.
Las alianzas únicamente le prolongan la agonía, el sufrimiento y, de ambicionar sobrevivir, lo único que le queda es ser un partido satélite, un partido bisagra.
Provecho.
SERVICIO URBANO DE XALAPA
Sacando fuerzas de la flaqueza la Cooperativa de Camióneros del Servicio Urbano de Xalapa, no ha dudado en renovar su parque vehicular.
Las armadoras, sabedoras que tan importante fuente de empleo se conduce con un alto sentido de responsabilidad, le han abierto las puertas poniendo los créditos a su disposición, le han dado cartera abierta en la adquisición de nuevas unidades.
La directiva se ha puesto la camiseta y uniendo esfuerzos le imprimen más dinamismo al asunto siempre pensando en el usuario, en cumplir con su objetivo. La adquisición de veinte nuevas unidades no es tarea fácil y eso la administración lo sabe, de allí que le habrá poner más ahínco al compromiso.
No cabe duda que cuando se quieren hacer bien las cosas no hay pretexto que valga.
Bien por la actual administración, la cual saca adelante la responsabilidad adquirida y, también, le cumple cabalmente a los más de quinientos socios.
Por cierto, en mucho ayudaría que las autoridades estatales fijaran la óptica en tan importante cooperativa, el trabajo coordinado daría como resultado más beneficios para la población. Rocío Nahle tiene la palabra.
Bien por la Cooperativa.