Sin tacto
Medio siglo
Por Sergio González Levet
Qué emoción, qué alegría, qué de sensaciones por el medio siglo de NOTIVER, el referente del periodismo veracruzano, el detonante de la información jarocha en su esencia y en su verdad.
No nos tocó vivir aquel día de hace 50 años, el 12 de diciembre de 1974, pero quiero imaginar ese día anterior, el miércoles 11, con los nervios de la edición princesa mientras se componían las páginas y se proyectaba la primera plana que sería el botón de muestra para los siguientes números; el 2, el 3… el 30, el 90, el 1,000… el 10 mil, el 15 mil.
No sé si aquella primera edición se imprimió en prensa plana o en rotativa, pero prefiero imaginar la emoción de los involucrados en el proyecto de NOTIVER cuando los tambores dejaron salir la tinta, y con esa magia que nunca se olvida pudieron ver los ríos de papel que se llenaron de señales, de sueños hechos noticia por fin, vertidos desde las páginas en blanco llenadas por los señores reporteros y desde los negativos vueltos imagen por los maestros de la lente… y luego cómo se fueron doblando y ordenando para conformar las páginas y las secciones… y después el corte final que fue dejando ordenado el desfile de los cien, mil, más ejemplares recién horneados para que salieran a ser voceados en las calles del Puerto en ese día histórico de nuestra virgencita, que cobijó al periódico naciente como todo lo que hacen los mexicanos de fe y con fe.
Diseñar el primer ejemplar de un periódico requiere de temple, de nervios, de enormes ilusiones, de ganas de hacer historia. Cuando sale el primer vástago y lo tomas con tus manos que se manchan de la tinta fresca aún, es -guardadas todas las distancias- igual que cuando te entregan a tu primer hijo en los brazos y sientes la vida nueva, fruto de tu vida y del amor, bullendo en un berrido salvífico que te hace entender que las cosas ya no van a ser las mismas para siempre y que podrás ser feliz como nunca antes y de una manera que no pudiste imaginar ni en tus más locos devaneos.
Salió el primer NOTIVER hace 17,262 días y sigue siendo un muchacho vibrante, un periódico joven, la esencia de lo jarocho insertada en el papel y la tinta.
Son 50 años y sus fundadores están seguros de que cumplieron su misión, pero sobre todo de que la seguirán cumpliendo porque este pueblo denodado y magnífico no merece menos que el mejor periódico de su vida, que cada mañana sale a gritos y se mete en el corazón de la gente, de su gente.
Gloria a Dios en las alturas…