Mesa de Redacción
Vientos de cambio
Enrique Yasser Pompeyo
Finalmente se concretó la llegada de Edgar Herrera Lendechy como delegado nacional con funciones de secretario general del Comité Ejecutivo Estatal del Partido Verde Ecologista de México en Veracruz.
Esta posición la asume en sustitución de Carlos Marcelo Ruiz Sánchez, quien funge como diputado de la LXVII Legislatura del Congreso del Estado y coordinador del Grupo Legislativo.
Hay un dato relevante. Cuenta con el respaldo del Comité Ejecutivo Nacional y, sobre todo, del diputado federal por Veracruz y líder moral de este partido en el estado, Javier Herrera Borunda.
La nueva encomienda de Edgar Herrera representa un gran compromiso y una gran responsabilidad ya que, de entrada, debe sacar adelante los trabajos del partido y fortalecer tanto las estructuras como a la misma militancia.
Pero no sólo eso. También debe construir puentes y alianzas, siguiendo la ruta de fortalecimiento y crecimiento en materia electoral, con miras a la renovación de los 212 municipios.
Además, Herrera Lendechy, como liderazgo del PVEM, debe entablar pláticas con el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) y el Partido del Trabajo con miras a 2025.
En breve deberá comenzar de manera formal las negociaciones con dichos partidos y ratificar la alianza para el proceso electoral municipal del próximo año.
De lo que se trata también es que ante el nuevo proceso electoral para la renovación de los ayuntamientos en Veracruz, el Partido Verde abandere a los mejores perfiles.
La idea es que quienes sean candidatas y candidatos deben ser honestos y preparados, con conciencia Verde. El objetivo es que más veracruzanas y veracruzanos sean gobernados por candidatos emanados de sus filas.
Si bien en el PVEM hay simpatizantes y militantes de todas las edades, las nuevas generaciones destacan para posicionarse en el ámbito político y electoral, por mencionar a cuatro personajes: Javier Herrera, Carlos Marcelo Ruiz, Edgar Herrera y Rafael Alarcón Barrientos.
Como se observa, en el Partido Verde hay vientos de cambio; existe unidad y se posiciona cada día más entre la población.