UV patentó equipo para entrenar nadadores fuera del agua
- El sistema innovador permitirá supervisar y corregir técnicas y movimientos de brazadas; la posición, velocidad, aceleración y esfuerzo realizado por el atleta, se puede analizar posteriormente
- En el diseño del prototipo participaron investigadores y estudiantes
Xalapa, Ver.- En años recientes diferentes especialidades deportivas se han beneficiado de los avances científicos y tecnológicos, lo cual ha permitido el análisis de movimientos de los atletas a través de herramientas innovadoras mejorando algunas disciplinas como el tenis, futbol y baloncesto, entre otros.
Antonio Marín Hernández, investigador adscrito al Instituto de Investigaciones en Inteligencia Artificial (IIIA) de la Universidad Veracruzana (UV), expuso que la natación –considerada altamente competitiva y con miles de practicantes en todo el mundo– ha recibido poca atención debido a que el estudio de la biomecánica se complica por la presencia de agua, limitando el uso de sensores o dispositivos electromagnéticos en una piscina.
Ante esto, un equipo multidisciplinario de investigadores de la UV –del que forma parte–, acompañado por alumnos de la Facultad de Física, se interesó en diseñar un sistema de entrenamiento que ayude, tanto a nadadores como entrenadores, a analizar fuera del agua la técnica utilizada en esta práctica deportiva.
Explicó que el sistema, cuya patente ya le fue otorgada a la UV por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), es una disposición adaptada para funcionar fuera de la piscina utilizando un mecanismo de retorno de fuerza que simula la resistencia del agua.
Dijo que comúnmente los entrenadores analizan y sugieren el movimiento de los brazos del nadador estando fuera del agua, y para ello utilizan bandas elásticas que simulan la resistencia del líquido; sin embargo, ésta no es proporcional a la posición y orientación de la mano del nadador, sino de las características específicas del estiramiento de la banda.
La ventaja del dispositivo propuesto por los universitarios es más eficaz, porque el entrenador puede corregir la posición del brazo del nadador al portarlo, lo cual le hace sentir la diferencia en la fuerza ejercida.