Con la finalidad de exigir a las autoridades locales que cesen las agresiones, robos y extorsiones de las que han sido víctimas presuntamente de parte de elementos de la Policía Municipal, los motorrepartidores de Xalapa se manifestaron frente a Palacio Municipal cerrando la vialidad de la calle Enríquez.

Con una marcha, realizada desde la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) a la zona Centro, quienes se dedican a realizar entregas de alimentos y productos varios acusaron que los elementos de la corporación municipal los han agredido en varias ocasiones.

Denunciaron que han sido detenidos y liberados a las cuatro o cinco horas, además de que han tenido que sacar su motocicleta del corralón, lo cual les cuesta alrededor de mil 100 pesos.

Uno de los repartidores, que prefirió mantener su anonimato ante el temor de ser agredido nuevamente, señaló que elementos de la Policía Municipal lo detuvo sin motivo aparente y le quitó su teléfono celular.

Afirmó que los elementos se encuentran usurpando funciones, ya que realizan detenciones y revisan documentos de pertenencia de la motocicleta, actividad que le corresponde llevar a cabo a los elementos de Tránsito del Estado.

“Yo grabé al policía haciendo una acción indebida, ellos estaban en la patrulla y al querer grabar su nombre me arrebató el teléfono y avanzaron, me arrastró varios metros, me jaloneó y me robó, toman fotografías de nuestras conversaciones del trabajo, lo que queremos es una plática con Ricardo Ahued para que los policías nos dejen de amedrentar, nos dejen de robar y nos respeten”, expresó.

Refirió que ya había existido un acercamiento con las autoridades estatales y municipales, pero no se han logrado detener las acciones a cargo de los elementos policiales.

Manifestó que son alrededor de 300 repartidores en Xalapa, los cuales se encuentran en riesgo de ser detenidos o señalados de algún acto que no cometieron.

Aseguró que al recibir la orden de detenerse lo hacen sin poner resistencia y permiten que se realice la verificación de la motocicleta.

Finalmente señalaron que, “Nosotros nos detenemos porque nada debemos, contamos con tarjeta de circulación, con la factura y con todos los documentos oficiales, tenemos varios clientes y lo menos que necesitamos es perderlos, a veces quieren revisar la comida y nosotros no podemos permitir que los alimentos que vamos a entregar sean abiertos o se entreguen en mal estado porque de eso depende nuestro trabajo”.