Sin tacto
¿Aztecas o mexicas?
Por Sergio González Levet
El término “azteca” para denominar al imperio prehispánico que halló y conquistó Hernán Cortés es totalmente incorrecto. Es un nombre más falso que un billete de 13 pesos.
En esto de las historias oficiales surgen muchas incorrecciones que se tratan de imponer por decreto. Tal es el caso de esa denominación de los indios que estaban enseñoreados en el México prehispánico a la llegada de Cortés.
Eran los mexicas, una tribu de guerreros que había llegado hacia 1215 al Valle de Anáhuac desde un lugar mítico al norte del país llamado Aztlán, de donde provenían las otras tribus asentadas desde varios siglos antes. “Aztecas”, pues, eran todas las tribus que habían ido llegando del norte.
En ese contexto, el antropólogo Federico Navarrete advierte que llamar «aztecas» a los mexicas sólo porque proceden de Aztlán es una generalización. «Aztecas eran todos los que vivían en Aztlán. Y los mexicas eran parte de ese conjunto, pero había muchos más. No eran el único pueblo que vivía ahí».
Chalcas, colhuas, tepanecas, tlahuicas, tlaxcaltecas, xochimilcas eran también pueblos aztecas, según la Historia de las Indias de Nueva España.
Desde la Conquista y durante los 300 años del virreinato se usó el término “mexicas”. Bernal Díaz del Castillo nunca emplea el gentilicio “aztecas” en su Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España, y Hernán Cortés tampoco lo utiliza en sus Cartas de Relación a Carlos V.
Eso de “aztecas” lo empezaron a usar los antropólogos extranjeros que vinieron a estudiar la historia y la arqueología de México a partir del siglo XIX, como William Robertson y William H. Prescot.
¿Por qué usar “aztecas”? Pues por una razón que tiene que ver con una actitud imperialista. En la segunda mitad del siglo XIX, los Estados Unidos comenzaban su proceso de expansión y se empezaban a sentir dueños del mundo. Los códices antiguos decían que los mexicas habían venido del norte, de Aztlán, que en realidad está ubicado en Colima, y ellos se imaginaron que venían de algún lugar como California. Fíjense entonces que al llamarlos aztecas se hace referencia a que son originarios de lo que ahora son los Estados Unidos (y ésa es una de tantas teorías sobre el origen del hombre en América que aún no ha sido debidamente demostrada).
“Referir a los mexicas como aztecas es en realidad una gran paradoja, y en el peor de los casos una grave afrenta por como la historia sucedió según apuntan grandes especialistas como el prestigiado investigador Miguel León Portilla, y es que, en realidad, ¡los aztecas fueron los opresores de los mexicas!”
Así que el Estadio Azteca, la Televisión Azteca y el Banco Azteca deberían mejor ser llamados “mexica”.
Y por eso México se llama así y no Aztlán.