Columna 33
– Tres años de nepotismo
– ¿Pura transformación?
Por Carlos Lucio Acosta
VERACRUZ .(México).- El servidor público que valiéndose de sus facultades dé empleo, cargos o concesiones de manera directa o indirecta a familiares, amigos o recomendados, incurre en el delito de nepotismo.
Leamos algunos de los ejemplos registrados en los recientes tres años de cuestionada administración.
La presidenta de la mesa directiva del senado de la república, Oñga María del Carmen Sánchez Cordero Dávila no solo gana mensualmente 384 mil 599 pesos con 45 centavos, distribuídos en 75 mil 690 pesos con 46 centavos de salario y 308 mil 859 pesos por concepto de prestaciones, sino además recomendó a ocho familiares para cargos en la administración pública federal y estatal,
Su hija Paula García Villegas Sánchez Cordero, es magistrada en el Concejo de la Judicatura Federal (CJF) con salario mensual de 212 mil 340 pesos con 29 centavos y por concepto de prestaciones un millón 276 mil 516 pesos con 49 centavos.
Su hermana María de la Asunción Sánchez Cordero Dávila, es subdirectora de Área en la dirección general de Comunicación Social y Vocería en el Consejo de la Judicatura Federal.
Su sobrino Jorge Emilio Sánchez Cordero Grossmann, es secretario técnico de Estudios Constitucionales en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Su sobrina María del Rocío García Raba, es coordinadora técnica en el Consejo de la Judicatura Federal, con salario de 39 mil 205 pesos con 49 centavos.
María Alejandra García Raba, sobrina de la presidenta de la mesa directiva del senado, es subdirectora de Cursos y Talleres en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), con salario bruto mensual de 60 mil 358 pesos con 30 centavos.
Francisco Luis García Raba, sobrino de Olga María del Carmen Sánchez Cordero Dávila, es subdirector de Área en la secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), con sueldo bruto mensual de 46 mil 608 pesos,
El sobrino Enrique de Jesús Nachón García, es secretario de Desarrollo Económico en el gobierno de Veracruz (SEDECOP), con sueldo mensual de 87 mil 501 pesos con 9 centavos.
Y la sobrina María Gabriela Nachón García, es directora académica en el Instituto de Ciencias de la Salud en la Universidad Veracruzana, con salario mensual de 65 mil 515 pesos con 4 centavos.
El poder aplastante del nepotismo institucionalizado no se detiene.
El secretario de Salud (SS), Jorge Carlos Alcocer Varela, ubicó a su hijo Jorge Adrián Alcocer Castillejos como director general de Delitos Financieros y Diversos, de la secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), con salario mensual de 141 mil 324 pesos. Ingresó el 25 de enero del 2019.
La magistrada Janine Otálora Malassis, recomendó a su hermano Rafael Jean Otálora Malassis como secretario del magistrado regional en la Sala de Toluca, estado de México, Juan Carlos Silva Adaya, en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, con salario de 112 mil 527 pesos con 59 centavos.
Nicolás “Nico” Mollinedo Bastar, chofer y coordinador de logística del presidente Andrés Manuel López Obrador, ubicó a su
primo hermano Rafal Marín Mollinedo como director general del Corredor Multimodal Interoceánico del Istmo de Tehuantepec.
En campaña condenan con índice de fuego la práctica del nepotismo, pero una vez con el poder constitucional en la mano, lo alientan y lo protejen.
Así es la política de la Cuarta Transformación, contradictoria, inestable e ineficiente.
Sólo para tus ojos . . .
El nepotismo es un signo de la decadencia actual, afirmó el entonces candidato a la presidencia de la república Andrés Manuel López Obrador, en visita al municipio de Huayacocotla, Veracruz, el once de enero del 2018.
(DR) Columna 33, 2021, México