¿Y el bienestar de la familia? Salario mínimo: $141.70; tortilla $15.00 el kilogramo; huevo a $70.00 el cono
Gas doméstico incrementa su precio cada día, provocando esta cauda inflacionaria.
Irineo Pérez Melo.- Pese a lo señalado por el presidente Andrés Manuel López Obrador que no aumentarían las tarifas de los servicios públicos cómo el gas y energía eléctrica, así como de productos básicos como la tortilla y otros productos de la canasta básica, la realidad que viven los mexicanos es otra.
En el mes que está por concluir, los aumentos que éstos han alcanzado ya superan al porcentaje otorgado a los salarios mínimos, lo cual imposibilita a la gran mayoría de la clase trabajadora hacer frente a los gastos que implica la adquisición de los alimentos, que por este motivo han incrementado sus costos
Tan solo la tortilla, en el presente mes los industriales de la masa y la tortilla de esta capital se vieron obligados a incrementar en uno o dos pesos el kilogramo, cotizándose en trece, catorce o quince pesos; el huevo, un cono de 30, se cotiza actualmente en casi 65 pesos en los supermercados, pero en las tienditas de las colonias su precio alcanza hasta los 70 pesos y si se compra por unidad, el producto es expendido hasta en 3 pesos cada uno.
En el caso de la tortilla, los productores del ramo argumentan que este incremento es derivado por el alto costo que registró el servicio de energía eléctrica, por un lado, y el gas LP, por el otro, haciendo incosteable la actividad cotidiana que desarrollan, por lo que no les quedó más que incrementar el precio de la tortilla.
En el caso del gas doméstico, el tanque de 20 kilogramos se cotiza en $ 483.60, el cual en menos de quince días sufrió un nuevo aumento, ya que a principios del presente mes su precio se tenía en $472.40 pesos
El trillado bienestar para las familias pobres, que tanto ha difundido la Cuarta Transformación solo lo ven quienes se encuentra laborando en los primeros niveles de los gobiernos municipal, estatal y federal, porque al grueso de la población, esto no se refleja.
Ahora todos los miembros de la familia tienen que dedicarse a alguna actividad que les retribuya un ingreso extra para afrontar la carestía que se vive y más ahora por los efectos nocivo que en materia económica ha traído consigo la pandemia del COVID-19, que como lo señaló el Jefe de la Nación, “les cayó como anillo al dedo”, para soslayar su responsabilidad en la implantación de políticas públicas que mejoren la economía de las familias mexicanas.