La pandemia del COVID-19 afectó a estos centros escolares sobre todo en el norte del estado.
Tantoyuca, Tuxpan y Poza Rica, en donde dejarán sin trabajo a 5 mil empleados: Antonio Alarcón.

Irineo Pérez Melo.- Por cuestiones económicas derivadas de la pandemia del COVID-19, y la reducción de la matrícula, se estima que unas 20 escuelas particulares del estado de Veracruz, principalmente del norte del estado cierren sus puertas, dejando sin empleo a unos 5 mil trabajadores, entre personal docente, administrativo y de intendencia.

Esto lo dio a conocer Antonio Alarcón Camarillo, representante de la Asociación Nacional de Instituciones Educativas Particulares (ANIEP) en el estado de Veracruz, quien dijo que aun cuando no se tienen datos concretos del cierre de estos centros escolares, esta situación se está presentando sobre todo en las ciudades de Tantoyuca, Tuxpan y Poza Rica.

“Apenas estamos conformando la información porque se tiene la esperanza que, de aquí al 24 de agosto, en que inicia formalmente el ciclo escolar 2020-2021, se inscriban más alumnos y se recupere en algo la matrícula, ya que por el momento se prevé que ésta se reduzca entre un 15 y 20%”, añadió.

En entrevista, el representante de la ANIEP en la entidad veracruzana mencionó que el cierre de las escuelas es derivado por la falta de ingresos que han tenido, producto de que los padres de familia no están en condiciones de cubrir las colegiaturas, por lo que se está dialogando con los padres de familia para acordar dichos pagos.

Sin embargo, dijo que se han encontrado con algunas renuencias de parte de ellos y más ahora porque en el ciclo escolar venidero las clases se darán de manera virtual y a través de la televisión “no se sienten obligados a estar pagando una colegiatura, dado que la escuela particular está tratando de apoyarlos y asesorarlos para que los niños tengan un buen aprendizaje a través de estos medios o en la utilización de las plataformas digitales de internet y de las redes sociales para atender las dudas que tengan y puedan salir adelante”.

Admitió que el problema de los pagos que se tienen que hacer está afectando a estas escuelas que probablemente cierre y estimó que el adeudo que enfrentan algunas de las instituciones escolares particulares es de un 40% del total que deben pagar cada año lectivo, lo cual afecta la operación de las mismas.

Aunado a esta situación, indicó, lo que está motivando también el cierre de estas instituciones educativas privadas, son los gastos fijos que deben realizar por el pago de los servicios públicos como agua, energía eléctrica y teléfono, que son cuotas mínimas porque no se han utilizado las instalaciones, pero se tienen que hacer, así como del pago de impuestos, entre otros, como la renta de los inmuebles.

Por tal motivo, acusó la falta de apoyo por parte de los gobiernos federal y estatal para hacer frente a esta situación, aunque se habría comentado que había posibilidades de apoyos, pero no se han visto ningún tipo, lo que ha mercado el servicio educativo privado.

“Nosotros hemos tratado de estar en comunicación con las autoridades para obtener estos apoyos, pero ha sido muy complicado su atención”, añadió, al tiempo de señalar que lo que más les urge es que les prorroguen el pago de los servicios públicos, como agua, energía eléctrica, teléfonos e impuestos, “para que, en los siguientes meses, con un poco de la inercia del inicio de actividades pueda uno a solventar este tipo de situaciones”.

Además, señaló que en el caso de las becas que el gobierno otorga a los alumnos, “se pueda pensar en apoyar directamente a las escuelas privadas, porque a veces el alumno o el padre de familia que recibe estos incentivos, en realidad tienen que aprovecharlos para las necesidades más apremiantes, como es la comida y lo que menos piensan es en la educación”, concluyó.