Desde hace casi 4 meses la han traído de un hospital a otro sin recibir la atención médica y ahora por la pandemia ni siquiera le han programado cita.

 

Irineo Pérez Melo.- La señora Aurora Avendaño, quien presenta una severa tumoración en su ojo izquierdo, ha vivido las de Caín desde el pasado mes de marzo, al no poder ser atendida de su afección por falta de equipo quirúrgico y personal médico en los hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social de las ciudades de Minatitlán, de Orizaba y Veracruz.

La señora Aurora Avendaño García de 53 años de edad y su familia que radican en la Ciudad de Minatitlán, han sufrido un verdadero viacrucis en estos casi cuatro meses para que se le brinde atención médica en el IMSS y es la fecha que no han podido lograrlo, pues el argumento que se les ha dado es que por la pandemia y la falta de equipo y personal no se le puede atender.

Y es que la paciente refiere que hace aproximadamente un año se realizó la extracción de un molar y que a los pocos días empezó a sufrir de una inflación en su ojo izquierdo, lo que ocasionó la formación de un tumor que no pudo atenderse en su oportunidad por carecer de recursos económico para ello.

La familia carece de seguridad de seguridad social, su esposo es “franelero” en una sucursal bancaria de Minatitlán y debido a la pandemia del COVID-19 y al cierre de calles aledañas, se quedó sin trabajo.

Menciona que compró un seguro de un mes, pero no le sirvió de nada, al no tener avances en su atención en ese tiempo y que posteriormente, gracias a que su hijo fue contratado en una empresa que le otorgó servicios médicos es que pudo ser atendida, en la Unidad de Medicina Familiar de Minatitlán.

En ese nosocomio no se le pudo dar la atención correspondiente, por lo que fue remitida al Hospital Regional de Orizaba, en donde recibió consulta en dos ocasiones, con la esperanza de ser operada quirúrgicamente, pero que por falta de personal médico especializado y equipo quirúrgico, no fue posible, trasladándola al Hospital Regional de Veracruz Puerto.

En este nosocomio, por la emergencia sanitaria que se vive por la pandemia del coronavirus, es la fecha que no le han dado cita para su valoración, por lo que ahora sin mayores esperanzas, se encuentra sumida en un severo cuadro depresivo que la mantiene bajo tratamiento psiquiátrico.

Su familia se encuentra desesperada, al no contar con recursos económicos para que pueda ser atendida por un médico particular, por lo que han tenido que recurrir al apoyo de la ciudadanía para recaudar fondos económicos para poder operarse y extraer el tumor que presenta.

Finalmente, hizo un llamado a las autoridades correspondientes para que intervengan ante la institución médica y este martirio que ha vivido los últimos meses se acabe, brindándole la atención médica requerida.